El uso diario de mascarilla se ha convertido en algo obligado en España. ¿Has notado que tu piel ha cambiado desde entonces?

Granitos, irraciones, descamación… son sólo algunas de las afecciones más comunes.

En este post voy a intentar ayudarte para que aprendas a cuidar tu piel en época de Coronavirus

¿Qué le pasa a mi piel?

No estamos «genéticamente diseñados» para llevar una mascarilla tantas horas al día, es un hecho. Es por ello que nuestra piel se ve alterada, sobretodo en épocas de calor.

La piel suda, es algo necesario y no tiene nada de malo. El problema es cuando este sudor no puede evaporarse y se queda durante mucho tiempo en nuestra piel. Aquí es el momento que aparecen los granitos, las rojeces… Si a eso le sumamos el roce constante es cuando pueden aparecer heridas, irritaciones severas…etc

¿Qué puedo hacer para evitarlo?

No podemos evitar el uso de mascarilla, se ha impuesto por ley y lo único que podemos hacer es adaptarnos a ello. Pero tranquil@, aquí te dejo varios consejos o «tips» para que tu piel no sufra tanto:

Adapta tu rutina facial

Ahora tu piel tiene unas necesidades diferentes. Muchas preguntas sobre: ¿debo seguir hidratando mi piel? Y mi respuesta es: por supuesto! Sin embargo, las fórmulas más ligeras (más ricas en agua y menos en lípido) son las ideales para usar antes de ponerse la mascarilla.

   

El secreto de la rutina perfecta es seguir los siguientes pasos: Limpiar + Tonificar + Hidratar

Si estás maquillada, antes del primer paso deberías desmaquillar y si vas a salir a la calle el último paso sería proteger tu piel con un FPS.

Si tienes la piel muy seca o eres fan de los aceites te recomiendo dejarlos para la noche o en momentos determinados que sepas que no vas a tener que ponerte la mascarilla.

Además, por la noche es el momento ideal para usar cremas más reparadoras que ayudarán a que tu piel se quede más confortable.

¿Cómo me limpio la piel?

Con el uso de mascarilla yo recomiendo el uso de jabones sin detergentes, tipo Syndet o los específicos para pieles atópicas.

Y no, el jabón de manos no es una opción válida.

Para aclarar: agua fresquita (no caliente) ayudará a descongestionar y desinflamar. Para secarte usa una toalla o muselina DIFERENTE CADA DÍA y si no eres capaz de ello puedes usar tissues o papel.

También te recomiendo limpiar tu piel antes de ponerte la mascarilla y justo después de quitártela, que no te de pereza porque el resultado te lo dará el ser constante.

¿Puedo usar maquillaje?

Por poder… claro que se puede pero si vas a llevar mascarilla las 8 horas de tu jornada laboral: ¿No te parece algo absurdo? Intenta maquillar solamente tus ojos (corrector, sombras, máscara de pestañas…) y deja de lado la base de maquillaje solamente para las ocasiones en las que sepas que solo vas a llevar la mascarilla un breve espacio de tiempo.

¿Y si me salen granitos, rojeces o heridas por el roce?

Para prevenir los granitos e irritaciones lo más recomendable es poder ausentarse un momento para retirar de un lateral la mascarilla y secar bien la piel con un pañuelo mediante toques.

Para prevenir irritaciones, se puede aplicar previamente antes de la mascarilla vaselina, biopel e incluso poner apósitos (por ejemplo, una tirita en el puente de la nariz) en las zonas de roce.

Cuando hay una ligera irritación una crema reparadora puede calmar y curar la piel. Para prevenirlas lo mejor es aplicar vaselina, Biopel… en las zonas de mayo roce para protegerlas.

En casos más extremos ( por ejemplo, úlceras) lo mejor es consultar con un dermatólogo para que recomiende una crema adecuada ya que en muchos casos se prescriben cremas con corticoides.

Y muy importante: INTENTA CAMBIAR DE MODELO DE MASCARILLA Y NO REPETIR. Las mascarillas acumulan muchísima suciedad en un solo día, lávalas o deséchalas, después de cada jornada. El hecho de usar varios modelos evitará que aparezcan irritaciones y descamación por roce en las mismas zonas.

En mi caso tengo varios modelos de higiénicas, ffp2, tela… y voy alternando, así los roces nunca aparezcan.

Mi mejor consejo:

Beber mucha agua. No solo vale hidratarse por fuera, por dentro también es muy importante. En cualquier descanso aprovecha para retirarte la mascarilla con cuidado, secarte el sudor y beber aunque sea unos sorbos de agua.

Al final, el tener una piel saludable es cambiar tu rutina, adaptarla  a las necesidades de tu piel y ser constante en ellos.